Los personajes no son míos son de Stephanie Meyer
Edward Pov.
Tengo que salir de aquí, me estoy aburriendo demasiado. Como casi siempre todos en mi familia está metido en sus asuntos, Alice diseñando; Emmett en los videojuegos; Carlise leyendo; Esme decorando y yo sin hacer nada, la música no llega a mi así que no hago nada.
-Voy a salir, voy a caminar en la playa un rato- y sin escuchar respuesta salí por la puerta trasera y fui corriendo hacia la playa, llegue y otra vez escuchaba música, y una voz acercándose, bueno más bien emergiendo, esa voz era música para mis oídos. Me limité a sentarme en la arena y escuchar esa voz.
Pasaron las horas, decidí que era hora de irme, pero vi algo en el agua, de tras de una roca, como escondiéndose. –Quién eres? Qué haces ahí en el agua?- pregunte, trate de buscar una mente en el mar, y… escuche voces muy en el fondo del mar, eso era extraño; pero nada en detrás de la roca. –Se que estas ahí, no te voy a hacer nada- si no eres un peligro claro pensé irónicamente.
-Quién eres tú? No pienso salir si no me dices quien eres, y si tratas de entrar y nadar hacia mí, no me vas a atrapar.
-De acuerdo, pero no te vayas, solo quiero verte. Soy Edward Cullen, ahora te toca a ti…
-Soy la Prin… Bella, Bella Swan.
-Ok, mucho gusto Bella, ahora podrías decirme que haces ahí, o tan solo podrías sentarte en la roca, para verte; por favor.
-Es que no puedo, es un secreto…
-Sé guardar secretos créeme, yo tengo uno muy grande- dije, sentía un impulso extraño por conocerla y por confesarle el secreto.
-Solo me sentare en la roca, de acuerdo?
-Ok
-Y como me veras?
-Solo quiero verte, si quieres me puedo meter y estoy sentado en la otra roca, para conocernos.
-De acuerdo.- Nade hasta donde estaba la roca, espere y vi como iba llegando Bella, su nombre era tan lindo. Me di cuenta que tenia cuidado de no mostrar sus piernas trate de ver atreves del agua, pero cuando vi sus ojos, me quede hipnotizado, eran de un hermoso color achocolatado, ya no pude bajar la vista, era realmente hermosa. –Y bien que haces aquí en el mar?
-Esa misma pregunta te hago yo, no deberías estar ahí, el agua de mar es helada y mas por esta época, y si te enfermas, o peor aun y si te lastimas.
-El agua no está fría para mi, y nada me va a pasar, todos en el mar me conocen y me respetan como soy su… perdona ya estoy diciendo de mas. Yo ya te conteste en cierto modo y faltas tú?
-Es justo, mmm… yo me estaba tranquilizando y dime tu también escuchaste la voz?
-no que voz?- me pregunto confundida, se formo una arruga en su delicada frente.
-Nada, creo que no lo escuchaste…- sonreí y agache mi mirada. Y me di cuenta traía solo unos caracoles, y solo eso, levante la vista, y ella está viendo hacia el sol; distraída, se veía tan hermosa, el viento azotaba su cabello hacia mi dirección, olía a fresas y su sangre exquisita, pero nada de eso me importa…
-Me tengo que ir, ya estuve mucho tiempo fuera de casa y si no llego pronto mi papá realizara una tormenta, terrible…
-Espera, no tienes que ir para allá?- le pregunte, tomándola del brazo y señalando hacia la otra dirección. Ella negó con la cabeza, bueno eso sí que es extraño. –Pero, te volveré a ver?
-No lo sé, si es así mañana aquí a la misma hora, y si quieres trae algo para que no tengas que sufrir frío- dicho esto, me dio un beso en la comisura de los labios, corto, y cerré mis ojos; cuando me di cuenta se había ido. Nade a velocidad vampírica hasta la orilla, llegue y corrí hasta el castillo. Llegue y fui hacia mi cuarto, evitando toda pregunta que les surgiera. Me acosté sobre mi sofá, y como nosotros no dormimos, me quede pensando toda la noche en Bella.
Bella Pov.
Edward Cullen, nunca olvidare su nombre. Llegue al palacio y me escabullí hasta llegar a mi cuarto, me dormí y soñé con Edward Cullen. Mi sueño era extraño, Edward bebía sangre de un animal, y él me veía como una sirena, después era humana, algo difícil de creer, ya que aunque podía convertirme a mi misma en humana, nunca lo había intentado, y después de todo eso, Edward y yo bebíamos la sangre de un animal. Desperté algo histérica, pensando en ese sueño, sabía que tarde o temprano iba a tener que dejar de verlo, el no se podía enterar de mi secreto, cuando dijo su nombre supe que era el Príncipe Edward Cullen, estuve a punto de decirle lo que yo era, no puedo creerlo, pero él me hacía sentir mucha confianza y me sentía atraída hacia él. No podía esperar hasta el día siguiente para verlo de nuevo.
El primer encuentro :D ¿qué dicen?
No hay comentarios:
Publicar un comentario