domingo, 5 de agosto de 2012

Chapter 5


Los personajes no son míos son de SP yo solo los uso en mi alocada imaginación. Está prohibida su copia parcial o total de este fic. 


Pase por Tanya y aun estaba con la furia y con imágenes en mi cabeza de mi padre e Isabella, vi como Tanya bajaba las escaleras, le abrí la puerta del copiloto y cuando vi que estaba sentada y cómoda, cerré la puerta y me subí de mi lado.
Gire mi cabeza para apreciarla mejor, llevaba una falda roja hasta un poco arriba de la rodilla, y una blusa pegada a su cuerpo de color blanda y unos zapatos a juego con la falda, se vía muy bien.
-te ves muy bien Tanya-le dije a modo de alago, ella sonrió y bajo la mirada y murmuro un gracias.
-Sabes debo decirte que me sorprendió tu llamada-comento a modo de comenzar una plática, y bueno comenzó hablándome de la fiesta que estaba organizando, y algunas aventuras que ha pasado debido a que no le llevan lo que pide o que no le dan lo que pide y cosas así.
Tanya es muy alegre y siempre hace que me ría, en cuanto llegamos entramos en el momento, pedimos unas bebidas y cuando empezó a sonar Born This way, Tanya se dirigió a la pista llevándome a mí con ella; bailamos bastante, me gustaba bailar; por eso al lugar donde la lleve ponían de todo tipo de música.
Ella bailaba bien y de repente en algunos movimientos se me insinuó; yo no estaba muy seguro de que llegáramos a tener sexo, no quería porque sabía que para ella sería algo más que lo que sería para mí.
-Tanya será mejor que nos vayamos ya-le dije cuando vi que las copas se le habían subido más de la cuenta.
-No Edward, un rato más, vamos a bailar-dijo colgándose de mi cuello.
-No mejor vámonos de aquí, vamos a tu casa-le dije tomando su bolsa y llevándola casi cargando.
-Mi casa está sola no están mis padres…
-No Tanya, yo no quiero ir a tu casa para lo que crees…- no me dejo terminar mi frase sus brazos volaron a mi cuello y sus labios se estamparon en los míos, el alcohol también estaba en mi sangre y bastante alto; sus labios era suaves pero no tanto como los de mi Isabella.
-Anda Eddie, vamos a mi casa, ahí será más cómodo-dijo Tanya susurrando en mi oído, un gruñido salió de mi garganta y la empecé a guiar a mi coche, en donde me encamine a su casa. Cuando llegamos me percate que en efecto estaba su casa sola; la acompañe a su habitación; dado que apenas y podía caminar, la lleve cargando cuando entre en su habitación ella comenzó a besar mi cuello.
-Tanya, detente, créeme que no quieres que pase esto.
-Pero si quiero Edward-dijo haciendo un puchero como niña pequeña, estaba ya sentada en su cama y se veía indefensa y con los besos que me dio me llegó a prender, eso sin contar que se iba quitando su blusa.
-Tanya si me acuesto contigo, será solo una aventura-dije en un débil intento de convencerme que no era lo correcto.
-No importa, quedaremos como amigos con beneficios-dijo parándose y jalándome de la camisa; por un momento pensé en Isabella y en como probablemente estaría pasando la noche con mi padre.
La bese y la lleve a la cama, donde la recosté y me coloque encima de ella; cerré los ojos, porque no podía hacerlo sabiendo que era Tanya. Me imagine el cuerpo de Isabella, sus caderas, sus labios, poco a poco le terminé de quitar su blusa, botón por botón escuchaba como suspiraba, pero en ningún momento abrí los ojos, en mi mente trataba de imaginar que la que suspiraba, se retorcía de placer y gemía era Isabella.
De un momento a otro tenía a Tanya desnuda debajo de mi, lentamente me fui introduciendo en ella, me constó un poco de trabajo entrar completamente, pero lo logre; empecé a buscar mi satisfacción; cuando la penetre escuche un quejido de su parte, y cuando tocaba su rostro sentía algunas lágrimas; pero no me importaba, solo quería satisfacerme a mí mismo.
Escuchaba sus gemidos, y mi nombre que salía en pequeños suspiros de sus labios; pero en mi mente estaba el rostro de Isabella, ella es la que decía mi nombre; cuando sentí que me venía dije su nombre en un susurro, pero Tanya gritó mi nombre así que no lo escuchó.
-Gracias Edward, fue el mejor momento de mi vida-dijo, yo me gire aun con los ojos cerrados, ella se acurrucó en mi pecho y cuando los abrí me maldije en cada idioma que conociera.
Tanya era una buena chica y no se merecía esto, sin embargó ella había estado de acuerdo no? Pero eso no justificaba nada, eso solo decía que me aproveche de que estaba borracha, un momento, cuando la penetre me costó trabajo y escuche un gemido de su parte, y a la vez me sentí realmente poderoso; con cuidado me fije en las sábanas… Cuando vi la mancha no me pude sentir peor… ella era virgen, y yo se la quite, en cierto modo yo la hice mujer; eso solo empeoraría las cosas.
En toda la noche no pude dormir, pensando en lo cabrón que me había comportado y que en Bella estaría con mi asqueroso padre, le hiciera lo que le hiciera siempre estaría dispuesta y lista para él, con las piernas abiertas; a mí solo me utilizaría como un lindo juguetito; pero ya veríamos quien es el juguete de quién.
Me empecé a levantar tratando de no despertar a Tanya; pero fue un muy mal intento. –Edward ¿qué pasó? ¿Te vas? Pero pensé que tal vez tu y yo…
-Lo siento Tanya pero debo irme-la corte mientras me vestía, me sentía como un bastardo pero era mejor que seguir con una farsa que solo la lastimaría más de lo que la haría. Termine de vestirme, y me fui no le di tiempo de responder o de preguntar; solo me fui.
Subí a mi auto y me encontré manejando rumbo a la casa de Isabella; entre al edificio y el portero me detuvo abruptamente.
-Señor, disculpe pero no puede pasar.
-¿Por qué te lo ordenó mi padre?-pregunte tratando de esquivarlo.
-Sí señor, pero aparte no hay nadie en el departamento. Y por favor señor, a la señorita Isabella la estimo, es muy linda conmigo- ya me puedo imaginar que linda se porta –no quiero que termine peor. Ya aléjese de ella solo le provoca problemas…
-¿A qué se refiere?-pregunte con temor de la respuesta. Después de haber pensado que hasta con ellos tenía sexo.
-No debería decírselo, pero lo hare para que se dé cuenta del daño que le ha provocado y haber si así la deja de estar importunando.
Poco a poco me iba preparando para lo peor y no me equivoque…a penas escuché las palabras "está en el hospital" mis pensamientos trataron de imaginar el por qué.
-¿Qué le pasó?-pregunté después de haberme recobrado un poco.
-No lo sé, solo sé que salió el señor Carlise, su padre- apreté los dientes al escuchar mi parentesco con ese ser –Después llegaron los señores Emmett y Rosalie y el pequeño Alec, de pronto me pidieron que abriera ya que no abría la señorita; cuando abrimos la llamamos y nada; así que entramos y ella estaba en su dormitorio… no le diré como; solo le diré que se la llevaron al hospital donde trabaja el señor Emmett.
-Dígame cual es por favor-le rogué acercándome a él.
-No lo haré, solo la meterá en más problemas; por favor; si la quiere aunque sea un poco déjela en paz. Él la lastimará más si la sigue viendo.
No dije nada me di media vuelta, y le llame a Jasper, sabía que a lo mejor estaba en una situación algo no apta; a lo mejor festejando con Alice o yo que sé, pero esto era importante.
-Jasper amigo, por favor necesito un favor-le dije antes de que saludará como acostumbra.
-¿Qué pasa Edward? ¿Está todo bien?
-No, no lo está. Isabella está en el hospital y tengo que verla, no he dormido y necesito saber en qué hospital trabaja Emmett, su amigo.
-Edward te das cuenta de lo que me pides…
-Sí, y si quieres te pagó, pero por favor ayúdame-rogué, en mi auto estaba listo para salir disparado a cualquier lugar en donde estuviera.
-No es eso, vamos Edward hay un millón de personas llamadas Emmett, tienes que darme algo más.
-Es que nada más se eso-conteste desesperado.
-Esposa, familia; dame con que puedo bajar la lista-contesto rápido.
-Su novia o esposa se llama Rosalie, su mamá de ella Lilian y tienen un restaurante donde trabaja Isabella.
-Sabes cuál es el nombre completo de Isabella?
-Si-dije tratando de recodar la vez que escuche su nombre -se llama Isabella Marie Swan.
-Ok. Dame veinte minutos-dijo mi amigo.
-Jasper es mucho tiempo…
-Será más sino me dejas buscar.
Corte la llamada y me encamine a mi auto, empecé a vagar por la calle; no sé donde trabaja Bella, tal vez así podría ayudarle a Jasper… ¿Qué fue lo que le hizo mi padre? Sonó mi teléfono y era Tanya, no le conteste; solo esperaba una llamada, una llamada que me diría donde podía encontrar a Isabella.
Sonó de nuevo mi teléfono y esta vez era Jasper, -¿Encontraste algo?-pregunte con desesperación
-Sí, trabaja en el hospital California, esta…
-Ya sé en donde esta, gracias Jasper-corte la llamada y me dirigí hacia el hospital. Por suerte no estaba lejos así que llegue rápido.
-Disculpe señorita, la habitación de la señorita Isabella Swan…
-¿Quién es usted?-preguntó la recepcionista; a lo mejor ordenaron que no entrara…
-Me llamó Anthony, soy un amigo-conteste, mi segundo nombre no era tan conocido; a veces mis padres me llamaban así, pero fuera de eso casi nadie sabía de ese nombre.
-Por favor espere, un momento, la señorita Isabella está delicada y no puede recibir visitas ahorita, pero en cuanto salga de terapia intensiva- ¿tan grave estaba? ¿O es que no quieren que entre?
En cuanto vi que se despisto la recepcionista, me dirigí a donde supuestamente estaba, busque hasta que vi a la muchacha que estaba el otro día en el departamento de Isabella.
Me acerque a escuchar, antes de entrar; si era la habitación de ella… y si era, escuche con atención los comentarios que hacían la rubia y el tal Emmett.
-¿Cómo sigue?-preguntó la rubia.
-Ya mejor Rose, solo tenemos que esperar a que despierte y responda bien.
-Y sus costillas? Y su pierna?
-Rose, en serio… se repondrá
-Dime como esta? No solo dime que tengo que esperar-contestó un poco desesperada; yo también lo estaba; quería saber exactamente qué fue lo que le paso.
-Sus costillas, bueno tiene dos rotas; y su pierna se la fracturo. Los moretones bueno ninguno pasó a mayores. Con el tiempo se le quitaran; y el tratamiento es para que no vaya a tener consecuencias por el golpe en la cabeza…
-Te juro que quiero matarlo… ella no tiene la culpa de nada… ella solo quiere…
-Ya Rose-dijo Emmett tratando de calmar a su novia o esposa, no sé que era. Pero eso no importa, mi padre era un completo monstro ¿Y tú que eres? ¿Un ángel? No, no lo era; pero no dejaría así a una mujer… tal vez el guardia tenía razón y lo mejor era alejarme de ella, creo que inconscientemente la he hecho pagar con el sufrimiento de mi mamá; todas las veces que la ha golpeado ha sido por mi culpa; no sé si antes estuvo así pero lo que sí sé es que desde que he estado con ella; siempre algo le pasa.
-Ya no… para…-escuche un murmullo…Isabella
-Tranquila, pequeña; estás a salvo-murmuró la mujer.
-Detente-dijo Isabella un poco más alto y después escuche sus quejidos.
-Bella, cálmate; estas en el hospital, nada te pasará-dijo Emmett
-Me duele mucho-dijo en un susurró Isabella.
-Sí lo sabemos, pero pronto pasará ya lo veras-dijo la mujer en un intento de calmarla.
-¿Dónde está Alec?-preguntó y podría decir que bastante preocupada e histérica.
-Cálmate Bella, está en cada de mis padres; lo cuidarán mientras estás aquí-dijo la mujer con voz algo autoritaria para calmar a Bella.
-Bella debes estar en reposo, tranquila. Lo que te pasó fue grave; ahorita ya despertaste, es un avance; pero hay que tenerte en observaciones, por lo que estarás aquí un tiempo. Y sin protestas Isabella-contestó Emmett –ahora si me disculpan tengo que hacer unas rondas ya que estoy aquí. Rose te quedarías con ella… claro no se para que pregunte-y sin más salió de la habitación; yo me escondí para que no me llegará a ver y me obligará a irme; tenía que entrar y pedirle disculpas antes de ir a enfrentar a mi padre…
-Bella, cuéntame que paso? Estamos las dos solas…-no hubo contestación.
-Sé que el hablar te hará sentir mejor, amiga.
-Él ya me había golpeado, por un comentario que escucho-apreté los dientes al recordar que eso había sido por mi causa. –Edward fue a verme ese día, cuando Carlise llegó el se estaba yendo del departamento y cuando escuchó la puerta azotarse, se asomo por la ventana a esperar que saliera un auto; y el único que salió fue el de su hijo; después se pasó fúrico…
-Calma, respira, no te alteres; eso solo provocará que te duela más-dijo la mujer… yo estaba sin habla, definitivamente ya la había hecho pagar e incluso creo que más de la cuenta.
-Me golpeo y me violó, después me volvió a golpear después de no sé cuantas veces que me violo, le imploraba que parara… que tuviera compasión… pero no lo hizo, después tomo mi cabeza y la azoto contra la mesa o la pared no recuerdo, lo siguiente es que estaba aquí.
-¿Por qué sigues con él?
-Sabes porque Rose.
-Hay algo más… al principio te gustaba no? Que cambio?
-EL que solo me utilizará, pensé que no era casado, me engaño y bueno estaba dolida, y él me dio confianza, seguridad y cariño; aunque ahora lo he pagado con creces-terminó de decir Isabella con la respiración entre cortada.
Así que ella amo a mi padre, no me queda duda siempre seré su juguete, una parte de mi cabeza aunque fuera pequeña; se alegro de lo que sucedió, porque me dio en mi orgullo el saber que amo a mi padre, tal vez no lo haga ahora; pero ese amor nunca lo podre tener yo…

El prox capítulo será diferente de Edward Pov. Será un personaje diferente ya verán quien a su debido tiempo.


Que les pareció, la verdad yo ya odio a Carlise, el muy… casi mata a Bella, y que tal la actitud de Edward; se hace el fuerte pero a la vez es igual que su padre o no? Ustedes que opinan

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